8 de octubre de 2009

Mujer

Basta solamente una mujer para eternizar un día como si se tratara de una posibilidad nueva. Los fuegos y el fuego son dificultades que no pueden recortarse a contraluz: se dan como un intercambio incendiario al encontrar los labios a punto del beso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Rabia

Tengo rabia. Tengo la rabia larga y la alegría del comienzo. Y lloro de ver a mi padre temer y de ver a mi madre entrever. Porque la rab...